La Vida De Assange Según Quienes Lo Vigilaban En La Embajada De Ecuador En Londres

Hizo lo que pudo, llamar a su tío paterno a Los Ángeles con la única llamada que le dieron las autoridades migratorias de su país. Hacia allá fue, a buscar a un señor que no conocía. Sintieron la condena de su región, la fuerza con la que su país lanza los escupitajos hacia afuera o el bagazo de 14 cadáveres diarios en promedio. Hicieron maletas y emprendieron el viaje por sus vidas. —Muchacho, alguien los quiere matar, me dijeron que van a matarlos a ustedes tres y a toda la familia.

Supongo que es eso, algo tan sutil e impredecible como el descenso de una pluma. El caso de Ananías y Safira dejó bien claro como Dios condena la mentira y el engaño. Pero, la lección que se enseñan también es que los seres humanos tienen el derecho concedido por Dios de poseer y controlar sus propiedades.

Me queda claro cuando ni por un momento se preguntan qué hacer si el amigo de su padre es un coyote. Con uno de esos ases del camino hay que saber qué palabras utilizar, qué negociarle. Son expertos subiendo cuotas, cobrando servicios extras. Si detectan que enfrente tienen a un primerizo le harán perder su virginidad sin compasión. A su primer marido, también policía, se lo mató la Mara Salvatrucha en un operativo.

Niños y niñas de 4 años en adelante pueden imaginar que controlan el poder de la Fuerza cuando el juguete The Child cierra los ojos, levanta el brazo y suspira como señales del gran esfuerzo que hace al requerir de tanta energía. Si bien la pandemia y la crísis económica nos ha tenido alejados un poco de la planificación de navidad, no hay duda alguna de que los protagonistas de esta fiesta son los niños. Tal vez con un solo regalo, pero bien seleccionado, sea más que suficiente. Este año, pese al encierro, la industria de los juguetes nos ha dado varias joyitas para destacar. «Viejos, niños, hombres y mujeres, se volvían hormigas después de la cosecha, para acarrear el maíz hormigas, hormigas, hormigas…» (Asturias, 1955). «La niebla que cabecea en los estanques podridos vendrá a pasearse a la ciudad. Y al mediodía, bajo el sol equívoco, el vientecillo arrastrará el olor de la sangre seca de un matadero abandonado ya hasta por las moscas».

fontanero las matas

Avanzar es avanzar de todas formas. Aún son ingenuos en estas rutas de la mentira. Nos embutimos en el autobús de tercera que viaja repleto de indígenas hacia la sierra.

Es una tiranía el robar dinero de unas personas para distribuirlo a otras. Como Walter E. Williams explicó muy bien, “se le acusa de robo si se toma por la fuerza el dinero de una persona, incluso desatascos san fernando si su intención es para dar el dinero robado a otra persona menos afortunada. Sin embargo, ¡los gobiernos hacen esto todo el tiempo! Toman el dinero de una persona y se lo dan a otras personas”.

Son silencios y ocasos que se rompen por esa fugacidad en las banquetas donde los niños juegan, en las esquinas donde los jóvenes conversan, en las tiendas donde las madres despachan. Tres indígenas se nos acercan con diferencia de minutos. Enjutos, con caras bondadosas y sandalias de caucho. Dicen que nos llevan a sus casas, en un pueblo intermedio. Dicen que ahí dormiremos bien y tendremos un plato de frijoles con tortillas para llenar la panza.

Los vigilantes cuentan que Assange da entrevistas a la televisión en calzoncillos, vestido solo de cintura para arriba, la parte que aparece en pantalla. Se descuida y deja sucio el aseo después de usarlo y algunos funcionarios se quejan al embajador de entonces, Juan Falconí. Otros trabajadores toman fotos de los desaguisados. La cocina que usa Assange es pequeña y sin extracción de humos y, aunque recurre mucho al microondas, a veces también a un hornillo eléctrico para guisar. Eso molesta a los empleados de la legación diplomática. En otras épocas, coincidiendo con importantes filtraciones de Wikileaks, se festejan los éxitos a lo grande.

Antes no se lloraba por esas cosas. Scribblenauts nos da una libertad casi ilimitada, cual Dios, cual artista, de hacer del mundo algo propio y moldeable. No solamente eres Maxwell, eres aquel ente a cuya facultad se encuentra el mundo; a cuya única e íntima experiencia se enfrenta el juego. Puedes invocar incluso al mismo Maxwell (bajo tu propio riesgo), al «Post Two-One-Seven» o a «Feep» de la historia anterior; puedes escribir la palabra «Vírgen» [al menos en la primera entrega] y spawneara el mismo personaje que si escribes «Gamer» (¡OOOOOOOUCH!). En definitiva, Scribblenauts es un juego donde el límite lo pones tú y donde tu eres el dueño de tu propia aventura; has lo que siempre qusiste hacer y deja que tu imaginación flote en este espectacular juego.

Allá arriba sólo hay marginación y velocidad. Y todos somos iguales, porque el suelo está al mismo palmo de nuestros pies y porque las sacudidas nos sacuden a todos por igual. Por aquellos meses de mediados de 2008, los dos se fueron a Tapachula. Auner durmió una última noche con su mujer.

El autobús que va de Ixcuintepec a la capital de Oaxaca traquetea más que el anterior. Esto sí es romper la oscuridad. La luz de los faros que se extiende genera dos remolinos de mosquitos y mariposas nocturnas que giran allá adelante cuando salen de la selva que atravesamos. Pitbull cede ante la impotencia y se echa a dormir. Desde hace varias horas está intentando que el motorista quite la monótona música norteña que nos ha impuesto desde que salimos.

Algunos jóvenes nos ven con mala cara y Pitbull vacila si responderles con otra mirada más lasciva o seguir como debería, cabizbajo, asumiendo que huye y que este camino está del todo en su contra. —Nos vamos al norte, hijo, verás cómo allá sí hay chamba, buen jale, buen dinero –había dicho el padre con su español migrante, esa mezcla de acento centroamericano y diccionario chicano. Qué más da si ni los reportes policiales contienen mucho. Esos mismos meses, cuando mataron a Juan Carlos -enero o febrero, Johny no lo recuerda a cabalidad- otros nueve jóvenes fueron asesinados en Chalchuapa.

No obstante, el colectivismo adoctrina que todos los bienes, medios de producción, el producto y el ingreso serán propiedad de la colectividad. Así, pues, el control individual de la propiedad privada y los derechos civiles plomeros en san nicolas de los garza son entregados en las manos de los líderes de la colectividad. Samuel Joseph Wurzelbacher, el fontanero Joe, se convirtió en una celebridad en el año 2008 cuando puso en aprietos al entonces candidato Barack Obama con una pregunta sobre los impuestos.

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